martes, 7 de octubre de 2014

Conferencia "Peligro Nuclear Argentina-Paraguay" a cargo del Dr. Raúl Montenegro

El pasado Lunes 6 de Octubre en auditorio del Centro Cultural Nordeste de la ciudad de Resistencia tuvo lugar el inicio del ciclo de Conferencias-Debate sobre la inminente instalación de una planta procesadora de uranio en la Provincia de Formosa y los peligros de la actividad nuclear. Con una gran convocatoria, dada la importancia de la problemática, la apertura del ciclo estuvo a cargo del Dr. Raúl Montenegro, quien expuso de manera ejemplar los riesgos que esta actividad viene a promover en el nordeste argentino.




Conferencia de Prensa

Por la mañana, el Dr. Raúl Montenegro atendió a los medios locales a través de una generosa conferencia de prensa brindada en la Biblioteca Popular Bernardino Rivadavia.



El Conflicto

Formosa contará próximamente con un Polo Científico y Tecnológico en el cual, entre otras entidades, se radicaría Dioxitek, empresa del estado procesadora de uranio, elemento radiactivo necesario para producir energía atómica.

Dioxitek, hasta hoy emplazada en medio de la ciudad de Córdoba, debe ser desalojada de esa metrópoli por disposición municipal y tras largos años de gestión en tal sentido. En esa ciudad se había constituido en una fuente permanente de contaminación ambiental, de transgresiones ocultas y desastres silenciados.

Una vez instalada Dioxitek en Formosa, el  uranio en tránsito, desde su procedencia hasta dicha planta elaboradora y, más tarde, ya listo, rumbo a las centrales nucleares argentinas, así como los residuos, pasarían por las rutas de nuestra provincia y de otras más, con todos los riesgos consiguientes. Podrían circular por ríos, ya que no hay información oficial acerca de los medios de transporte que se usarán. En cualquier caso, pueden imaginarse las consecuencias del más mínimo accidente. 

El paso y/o existencia de elementos nucleares en el  territorio se halla prohibido por varias constituciones provinciales, diversos municipios del país y por la carta orgánica de la ciudad de Resistencia.

La mera existencia de un depósito de uranio ya conlleva una peligrosa contaminación, así como su procesamiento que demanda agua y, para satisfacerla, Dioxitek se instalaría a la vera del río Formosa, tributario del río Paraguay, siendo éste a su vez, afluente del Paraná.
Como si aun fuera poco: la radicación de esta industria nuclear configura el primer paso para la implantación en Formosa de un reactor nuclear, objetivo ya anunciado años atrás.

La concreción del proyecto expone a un serio peligro a los seres vivos  en un radio de 500 Km alrededor de la usina atómica como resultado de la menor falla. Paraguay ha reaccionado vivamente ante esta amenaza potencial y ha cuestionado al gobierno argentino por su decisión, la cual desata e implica muchos otros problemas de diversa índole para una muy amplia región: sanitarias, legales, de derecho indígena, de seguridad, etc.